La crisis helena ha sido el caldo de cultivo donde ha
aparecido la 'sisa', una droga aparentemente muy dañina y con efectos
violentos.
Héctor Estepa | Fuente original: elmundo.es |
07/06/2013
Una nueva asesina 'pasea' por las calles de
Grecia . Se llama
'sisa' y
se ha convertido en una de las drogas preferidas de los 'sin techo'
helenos. Puede llegar a ser mortal en unos meses, dicen quienes la
utilizan. Se comercializa en forma de polvo y suele consumirse fumada.
Su precio es el mayor secreto de su éxito:
la dosis vale tan sólo dos euros.
Uno de los efectos colaterales de la grave
crisis económica helena
ha sido el descenso de poder adquisitivo de sus habitantes. Quienes
antes tenían muy pocos recursos ahora disponen de menos aún. Lo mismo ha
sucedido en el mundo de la droga.
A la 'sisa' se le conoce ya como la
'cocaína de los pobres' o
la 'droga de la austeridad'. Ha llegado a la opinión pública helena
tras la publicación de un reportaje en la web
norteamericana
'Vice', donde
varios adictos relatan sus experiencias con el novedoso estupefaciente.
"Su ingrediente básico es la metanfetamina y
sus efectos incluyen insomnio, alucinaciones y agresividad", explica a ELMUNDO.es Jaralabos Poulopoulos, director de Kethea, el mayor centro antidroga de Grecia.
"Te hace querer matar", dice uno de los consumidores a 'Vice'.
Para las autoridades es precisamente ese aumento de la violencia del
individuo uno de los efectos más preocupantes de la 'sisa'. "No está
claro si se produce por la metanfetamina o por la privación del sueño",
señala Poulopoulos. "Hay muchos testimonios de adictos sobre muertes
resultantes del uso de 'sisa'", añade. Su organización está a la espera
de conocer datos oficiales para certificar la veracidad de dichas
informaciones.
Aumento de las adicciones y del tipo de drogas
La rápida expansión de la 'sisa' ha puesto bajo alarma a las
autoridades sanitarias del país. Esa proliferación supone tan sólo la
punta del iceberg de un grave problema sanitario: "
Fue detectada por primera vez a finales de 2010, un año después del inicio de la crisis.
Los problemas financieros han llevado al uso y tráfico de drogas más
baratas, como las sintéticas, que están hechas con materias primas no
particularmente caras y no siempre bajo control nacional o
internacional", explica Poulopoulos, un experto reconocido a nivel
comunitario.
Esos datos han sido contrastados por el Centro Europeo de Monitoreo
de la Drogas y la Adicción a las Drogas. Según dicho organismo se ha
producido una grave multiplicación en la creación de drogas originales:
hasta 70 nuevas sustancias sintéticas fueron detectadas en 2012, mientras que de 2000 a 2005 sólo aparecieron cinco nuevas al año.
"Dichos estupefacientes pueden ser fácilmente producidos en
laboratorios caseros que pueden ser trasladados a otros lugares", añade
el experto. Tal es el caso de la 'sisa': se produce de forma barata,
mezclada en muchas ocasiones con
ácido de pilas, aceite para vehículos y champú.
Cuanto más barato, mejor, parece ser la consigna de muchos. Seis años
de recesión y tres de duras medidas de austeridad han hecho aumentar el
número de adictos en Grecia y sus problemas. "La crisis ha creado un
entorno depresivo en el cual los adictos sienten que no tienen ninguna
perspectiva o lugar en la sociedad", enuncia Poulopoulos.
Se calcula que
hasta 25.000 griegos tienen serios problemas con las drogas en
un país de 10 millones de habitantes. El elevado desempleo (hasta un
27% de los griegos carece de trabajo) ha sido uno de los grandes
culpables del alza en los problemas derivados de las adicciones.
Preocupa especialmente la cifra de
desocupación juvenil , cifrada en más del 64%.
Aun así, según la agencia europea antidroga, el heleno sigue siendo
uno de los estados con menos adictos durante toda su vida: sólo tienen
problemas permanentes con las drogas uno de cada diez ciudadanos.
Contagio de VIH al alza
Uno de los resultados de la depresión y la falta de salidas en la
Grecia actual para los consumidores habituales de droga ha sido el
aumento en el contagio de enfermedades infecciosas como el
VIH : "Los adictos se han convertido en más auto-destructivos durante la crisis y
ahora es más común compartir jeringuillas.
También ha descendido el uso de condones durante el coito, suponiendo
tales prácticas el aumento en los contagios de VIH", señala el experto.
Según los datos manejados por las organizaciones sociales y las
autoridades helenas, la incidencia del VIH entre los consumidores de
droga inyectada a través de jeringuillas aumentó
un 1.500% sólo de 2010 a 2011, cuando se dieron 256 nuevos casos.
Quienes luchan contra los estupefacientes y sus efectos secundarios
trabajan en Grecia en un contexto de crisis y presupuesto menguante. El
Kethea de Poulopoulos ha perdido a 70 de sus 500 trabajadores desde que
comenzaron los problemas económicos. "Las agencias de tratamiento hemos
pasado por cortes de presupuesto y la carga de trabajo se ha
incrementado. Hay una incertidumbre e inseguridad constante acerca del
futuro de la sanidad y los servicios sociales helenos", lamenta.
Okana, la organización griega a cargo de suministrar metadona como
tratamiento, alertó a principios de mes de estar a punto de agotar todas
sus reservas de dicha sustancia.
Esa situación de incertidumbre no sólo afecta al tratamiento por
parte de los doctores, sino también de los tratados. "Ahora hay una
menor motivación para el tratamiento porque muchos creen que, incluso si
consiguen liberarse de las drogas, será muy difícil para ellos
integrarse en una sociedad en la que el desempleo es tan alto", expone
Poulopoulos. Esa situación
aumenta también el riesgo de recaídas de quienes ya habían superado sus problemas.
El Gobierno heleno ha afrontado el parte del asunto desde una
perspectiva controvertida: en marzo decidió ordenar una redada policial
en el centro de Atenas y
transfirió a 132 adictos que viven en la zona a un centro de detención de inmigrantes a
las afueras de la capital. Los soltó al poco tiempo, argumentando que
habrían recibido mejor tratamiento médico en las instalaciones
oficiales.